Pagar a una trabajadora sexual, por amor más que por sexo. Segunda parte
Yo necesitaba expresar cariño, amor a una mujer; eso mitigaría el sufrimiento a que dio lugar aceptar que Lieba jamás será parte de mi vida, no volveré a interactuar con ella y por supuesto, eso representa un duelo. Con esa hermosa psicoanalista había tocado temas de sexualidad, le había informado sobre mi filia exhibicionista, que me agrada ser observado por mujeres estando desnudo, en una situación en que ellas no solamente no sienten malestar o incomodidad, sino al contrario, la experiencia les resulta agradable. Cuando le informé de ello a Lieba, esa psicoanalista que me atendió al comenzar el año 2019 (es decir hace cinco años), 20 años menor que yo —la mujer más hermosa del mundo— ella respondió que era algo natural, que era una manera de manifestar una parte importante de mí que tiene que ver con el modo como decidí vivir, la actividad física cotidiana amalgamada con hábitos de higiene muy adecuados que me proporcionaban una buena apariencia y expresar eso como una filia res