La aproximación de Fromm a la personalidad es de amplio rango en sus perspectivas y proposiciones. Él no es exclusivamente un psicoanalista, toma información de otras disciplinas—notablemente, historia, sociología y antropología. Un resultado de esta diversidad es que un crítico debe contar con conocimientos firmes en estas áreas para ser capaz de atacar el sistema total de Fromm. Pocas personas pueden hacer eso; por lo tanto, las críticas frecuentemente son dirigidas solamente contra una parte de su teoría. Por ejemplo, una crítica mayor, como hemos señalado, es que no cuenta con apoyo empírico sólido (o siquiera visible) para su teoría. Fromm no proporciona ningún dato específico de apoyo fáctico. El estudio de la villa mexicana se dio un tiempo considerablemente posterior a la época en que su teoría fue presentada. No se encuentra en sus escritos ningún dato en el que él base sus teorías (una crítica que no se ha hecho exclusivamente a Fromm, sin embargo). También ha sido cr...
Debe haber quedado claro hasta el momento que Fromm expresa una imagen generalmente optimista de la naturaleza humana. Coincidiendo con Adler y Horney, Fromm no considera que estamos condenados al conflicto y la ansiedad por fuerzas biológicas inmutables. Es cierto que Fromm considera que somos influenciados por fuerzas sociales, políticas y económicas en la sociedad en que vivimos. Sin embargo, no somos infinitamente maleables. Una persona no es simplemente una marioneta sujeta a las cuerdas movidas por fuerzas sociales, o “una hoja de papel en blanco en la cual la cultura escribe su texto”. Así, ni estamos fijados por instintos ni totalmente dominados por fuerzas sociales. Por el contrario, poseemos una naturaleza inherente, un conjunto de cualidades psicológicas por medio de las cuales damos forma a nuestras personalidades y a nuestras sociedades. Y es aquí donde el optimismo de Fromm—o al menos su esperanza—se introduce en la imagen. Él cree que contamos con un instinto inn...